Rosas, corazones, rosas, corazones...

Recuerdo cuando era chica y fui por primera vez 
 a España a visitar a mi abuelo, era febrero
 y las grandes tiendas, esas de varios pisos,

donde te podés perder todo el dia recorriéndolas,

 estaban totalmente vestidas de rosa.

En el sector perfumería te regalaban 

 tarjetones rosados perfumados, 

en las secciones pastelería, joyería, florería y peluches

 había un motivo recurrentemente abundante: 
las rosas y los corazones!

A mí me llamaba la atención porque por estos pagos nunca 

había escuchado hablar de San Valentín y sus dotes románticas.

Con el tiempo y la globalización, el santo nos fue alcanzando
y nos fuimos contagiando.
 Aunque yo soy como la publicidad que dice 

"Cortá con tanta dulzura",

siento que dar y recibir una linda sorpresa nos alegra el día.
Si sos de las que tienen una media naranja a su lado, Feliz día!

 y sino, siempre nos queda el recurso y la compañía de 
un buen chocolate!